domingo, 28 de agosto de 2011

Magufing I

¡Magufooooos!
Ya sé, ya sé que la palabra “Magufo” proviene de la combinación de “Mago” y “UFO” (OVNI en español). Pero es curioso que el término se parezca tanto a MacGuffin o Maguffin. Acuñado por Alfred Hitchcock es básicamente una excusa argumental que motiva a los personajes pero no tiene relevancia en la historia que se cuenta. Exactamente como una magufada. No tiene ninguna relevancia en la realidad pero motiva las acciones de los personajes magufos y, al igual que en las películas consume metraje, malgasta el tiempo de los blogeros que se esfuerzan en divulgar sus conocimientos reales para bien de los demás.

Y es que, especialmente en la blogosfera, la pseudociencia en el mejor de los casos y el delirio absoluto en el peor campan a sus anchas.

OVNIS, tarot, astrología y demás “mancias”, homeopatía, telequinesia, visión remota, telepatía, experiencias cercanas a la muerte, más allá, creacionismo y diseño inteligente (su versión más perniciosa), dimensiones paralelas, chemtrails, vacunas asesinas y conspiraciones de dominación mundial varias, civilizaciones tecnológicas en el paleolítico, Tierra hueca, ocultaciones de la “Ciencia Oficial” (sea lo que sea eso), psicofonías, espiritismo, qi, chakras, buenas y malas “energías”, ley de la atracción, productos milagro, calendario maya (en su versión apocalíptica), Nostradamus, castigos divinos, pulseras energéticas, par biomagnético, gemoterapia, reflexología, acupuntura, dianética, negacionismos varios como el del VIH y un largo etcétera de tonterías.

domingo, 21 de agosto de 2011

Lo que está pasando en Madrid.

Se busca por cómplice
de pedofilia.
Durante estos últimos días el delincuente Joseph Ratzinger también conocido por Benedicto XVI ha visitado Madrid para las mal llamadas Jornadas Mundiales de la Juventud en olor de multitudes.

Por si no fuese suficiente la cantidad de borregos fanatizados que tenemos en España, hemos importado para la ocasión unos cuantos centenares de miles desde diversos puntos del planeta. Gentes en su mayor parte humildes que han tenido que desembolsar cantidades de dinero modestas desde el punto de vista europeo pero importantes si consideramos la renta per cápita de algunos de sus países de origen, para poder pecar de idolatría según su propio criterio postrándose ante un becerro de oro en forma de octogenario cubierto de oropel y boato.

Pero esa cantidad de dinero no es suficiente para financiar todo el despliegue que han montado “los del voto de pobreza” en Madrid. Así que el gobierno ha aportado 25 milloncetes de nada (lo suficiente para pagar el subsidio mínimo a unos 5.000 parados durante un año). Además, empresas privadas han aportado otros 25 millones de los que se podrán deducir hasta un 80% en el pago de impuestos (traducción: 20 millones que se dejaran de recaudar, es decir que los pagaremos todos). Y todo esto en un país endeudado hasta las cejas en que el nivel de paro alcanza el 21% y donde se hacen recortes de servicios públicos un día sí y otro también. 

Ratzinger cómplice de pedofilia.


Ven conmigo que aquí hay mucha luz.
En 1962, el Vaticano aprueba el "Crimen sollicitationis", una serie de instrucciones sobre como proceder en casos en los que un clérigo hiciese uso de su condición de religioso para llevar a cabo acercamientos sexuales con sus fieles (incluyendo niños). Fue firmada por el cardenal Alfredo Ottaviani y sancionada por Juan XXIII.

Aparte de exponer los supuestos y las penas (canónicas por supuesto) que conllevasen, marcaba unos preceptos muy curiosos.
  • Todos los conocedores de los hechos estaban obligados a guardar secreto de ello bajo pena de excomunión. Esto incluye al propio sacerdote, a cualquier testigo y, por supuesto, a la víctima de tales abusos.
  • También se aplicaría la pena de excomunión para quien teniendo conocimiento de los hechos no los denunciase en el periodo de un mes ... ¿ante la justicia? No hombre no, ante la misma Iglesia por supuesto.

La Fe. Estupidez Autocomplaciente.


Es la primera de las llamadas "virtudes teologales" de la iglesia católica y eso ya debería hacernos sospechar.

Resumiendo mucho y llegando a la esencia del concepto, la fe es la asunción con completo convencimiento de algo sin ningún tipo de pruebas.

Es decir: fe = negación de la razón.

Supongamos que nuestro mejor amigo, en el que depositamos absoluta confianza, un día empieza a contarnos que ha tenido una revelación. Ha visto a Dios y ha hablado con Él.
Le ha dicho además que no debe ponerse sombrero los jueves, que tiene que levantar sus brazos al cielo tres veces diarias y lavarse la cara con aceite de acebuche cada luna llena.... ¡Ah! Y ya que está en ello, tiene que propagar este mensaje.

Si cumple estos preceptos, cuando muera llegará a un estado de absoluta felicidad rodeado de manjares exquisitos, mujeres atractivas y dispuestas, coche deportivos y las mejores drogas por los siglos de los siglos.